La pared es un cristal roto,
mis manos laceradas lo cruzan
y tras él, la vida enciende su antorcha.
Lastima el silencio inconmovible,
las llaves rodaron en ese hueco azul
de las esperas, y aprieta la soledad.
De pronto reacciono,elevo una plegaria,
la pared ya no existe,
mis manos están unidas en un rezo
y esbozo una sonrisa.
Él me acompaña.
Elsa Tébere
siempre cuando nos sentimos solos, nesecitamos tener esa fe, al final siempre biene a nosotros a protejernos a sentirnos a salvo, en una oracion, en nuestras manos abiertas a permitir la fe, el amor, dar, y recibir un abrazo lindo psot
ResponderEliminarGracias querida amiga¡te envío todo mi cariño!¡Besos!
ResponderEliminarMuy bello Solcito. Es un un gozo poderte leer y compartir tan maravillos pensamientos
ResponderEliminarBendiciones y siempre mi abrazo fraternal.
Recuerd a toda tu familia
Jose
Gracias José.Un gran cariño para vos y tu familia!
ResponderEliminarhola elsa tebere... perdona tu poeta mi ausencia... sin palabras, esa forma de describir la ayuda que siempre nos brinda nuestro creador fielmente. bendiciones mil...
ResponderEliminarGracias Nazgul,perdóname también a mí porque por razones familiares hce un tiempito que estoy un poco ausente.¡Un abrazo!
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